Es el segundo caso en la semana y se dio en las calles las Gardenias y Jorge Newbery en la localidad de Agustín Ferrari en Merlo.
Según cuentan un grupo de vecinos, el hallazgo se dio anteayer cuando quisieron ahuyentar a una manada de perros que rompía bolsas de basura, y al querer recoger los desperdicios se encontraron con una bolsa abierta donde allí estaba el cadáver de un bebé recién nacido con su cordón umbilical.
Cabe recordar que es el segundo caso que se conoce en una semana, el anterior hecho ocurrió días atrás cuando un vecino descubrió que varios perros comían el cadáver de un bebe, que se encontraba mutilado y quemado, donde su propia madre, menor de edad, fue imputada por el hecho pero al no alcanzar la mayoría de edad quedo a resguardo de sus padres y por la magnitud del caso se mudo hacia el interior del país.