En la mañana de ayer, el intendente de San Isidro, junto a integrantes de la Asociación Civil Usina de Justicia, participaron de una plantación de árboles en la plaza Castiglia, en memoria de las víctimas de homicidios y femicidios.
“Con esta iniciativa recordamos a las víctimas de delitos. La inseguridad es una de las mayores preocupaciones en la provincia de Buenos Aires. Siempre pedimos que haya justicia, pero eso no nos tiene que conformar; lo que queremos es que estos hechos no ocurran más”, señaló el jefe comunal, rodeado de familiares de víctimas de homicidio y femicidio.
Durante el acto, se plantaron ejemplares de jacarandá y se colocó una placa conmemorativa por los ocho años de la Asociación Civil Usina de Justicia. La entidad está conformada por un grupo de víctimas que perdieron familiares en situaciones violentas, y profesionales de distintas especialidades que voluntariamente trabajan y apoyan la labor.
“Es un mensaje de esperanza para quienes esperamos una justicia justa. Para que florezca la vida más allá del dolor. Me emociona que podamos plantar árboles en esta plaza de San Isidro, donde crecí y tengo los mejores recuerdos de mi infancia”, expresó Donata Chesi, médica y miembro de Usina de Justicia.
