Surgida luego de una de las tantas quiebras de empresas en el año 2001, la hoy Cooperativa San Remo ubicada en el partido de Lanús logró afianzarse a pesar de todos los años de tormentas e idas y venidas de nuestra alocada economia.
Dedicada al tejido de punto de chombas, sweaters, entre otras prendas que se abren paso entre los productos logrados por el esfuerzo y la dedicación de este grupo de trabajadores que no se dieron por vencido y desde hace 17 años tejen ropa y sueños.
«Tenemos nuestros clientes que nos conocen, conocen la calidad de nuestros productos que a pesar de que entra de afuera ropa mas barata confian en nosotros, aunque no podemos negar que la competencia existe y por eso la seguimos peleando» destacó Nelly, integrante de San Remo.
En un recuerdo, que trae la nostalgia de los primeros dias que buscaban ser una cooperativa, Nelly rememoró aquellos vaivenes llamados «burocracia» que entre tramites y papeles tuvieron la ayuda del Municipio de Lanús, que por aquel 2001 pusó una cuota de fé para que esta union obrera siga trabajando.
Actualmente, tienen una marca de ropa propia llamada «Percival» la cual detallan que «seleccionamos las mejores materias primas para garantizar un excelente producto, manteniendo así el prestigio y la calidad que nos ha convertido en líderes del mercado. Además, estamos en condiciones de ofrecer un servicio integral desde la concepción diseño,tejido,confeccion,lavado,planchado,enbolsado del producto, hasta la culminación del proceso con la Prenda ya terminada en su correspondiente Packaging».
Con este caballito de batalla para afrontar la ardua tarea de la cooperativa, todo sigue su curso en la planta pero con otro traspie que tienen que afrontar, como es el tema de las tarifas. «Nos vino mucho de agua, pasamos de pagar mil pesos, a 20, hasta 30 mil pesos tambien vino mucho de luz, una barbaridad, cuesta pagarlo pero la estamos tratando de pilotear como podemos».
«Con las rentas estamos bien, pero con lo que estamos maso menos es con el tema de los cobros, por ejemplo, vendemos y muchas veces nos patean el cobro de la venta para un mes mas, y eso dificulta entre otras cosas, por ejemplo el pagar la materia prima y otras cosas mas, entendemos la situación actual, nos adaptamos como podemos remando siempre para adelante» concluyó Nelly, mientras sus manos, en conjunto con la de sus compañeros siguen hilando los sueños de un futuro prometedor para esta cooperativa.
Fotos de Ezequiel Peralta
