La Policía Federal Argentina ha llevado a cabo una operación exitosa en la que se incautaron grandes cantidades de armas blancas y partes de animales en peligro de extinción.
Los detectives del Departamento Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina realizaron allanamientos en talleres en Tandil y Longchamps, encontrando cuchillos artesanales y otros enseres fabricados con partes de fauna silvestre protegida obtenidas a través de la caza furtiva ilegal.
La investigación comenzó gracias a una denuncia de las autoridades del correo postal de la Ciudad de Sauce, Provincia de Corrientes, sobre el envío de grandes cantidades de astas de ciervo a domicilios en Tandil y Longchamps.
La Unidad Fiscal de Investigaciones Rurales y Ambientales de Mercedes, del Ministerio Público de la Provincia de Corrientes, asignó la investigación al Departamento Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina.
La Policía Federal Argentina especializada en asuntos ambientales logró descubrir talleres ilegales y canales de venta interprovincial en las redes sociales, medios electrónicos y ferias.
La Unidad Fiscal requirió formalmente al Juzgado de Garantías de Curuzú Cuatiá los allanamientos de los domicilios involucrados, logrando así librar exhortos a los Juzgados de Garantías N° 1 de Tandil y Juzgado de Garantías N° 4 de Lomas de Zamora, quienes en sus respectivas jurisdicciones convalidaron los allanamientos.
Durante los allanamientos en Tandil, se encontró un taller clandestino en el que los sospechosos estaban trabajando en el momento del operativo. Se incautaron más de dos mil quinientas piezas de recortes de astas de ciervo axis, pezuñas de ñandú y colitas de peludo o “mulita”, así como una pata entera de ciervo.
En el domicilio de Longchamps, se encontró un taller de ensamblado de cuchillos con cabos confeccionados con partes de fauna silvestre. Se secuestraron unos doscientos cuchillos y otros enseres con cabos armados con partes de astas de ciervos axis, colas de mulitas, patas de ñandúes y partes de cuernos de antílopes de la india, así como diez cuernos enteros del mismo animal.
El material incautado no contaba con documentación que acreditara su obtención legítima. En el caso de las mulitas, su caza y comercialización de productos y subproductos está prohibida por estar en peligro de extinción.
Los responsables han sido detenidos y están a disposición de la justicia por el delito contemplado en la Ley 22.421 sobre la Protección de la Fauna Silvestre. Se estima que el valor del material incautado en el mercado negro ascendería a unos siete millones de pesos.