Su historia conmovió desde el primer minuto, ya que algún desalmado la tiró a un pozo lleno de brea en Libertad, partido de Merlo y sus llantos fueron la señal de alerta para unos niños que estaban pasando por ese lugar, y enseguida pidieron ayuda.
De este rescate se cumplió hoy un año de esta hazaña, en el que los bomberos acudieron al lugar y llamaron al «Proyecto 4 patas», un grupo de voluntarios que le ponen el pecho al rescate animal.
Ellos llegaron como angeles sin alas a salvar a esta perrita en una tarea que duró 9 horas y litros de aceite para sacarle la brea, «estaba completamente petrificada. El 100 por ciento de su cuerpo estaba endurecido: su boca, sus ojos, sus orejas, todo», destacaron desde el grupo de rescatistas.
Hoy su historia cambió y fue bautizada como Aloe, «casi milagrosamente, estaba viva gracias a que los dos orificios de su nariz estaban libres de brea. ¿Cómo llegó hasta ahí? ¿Quién fue capaz de cometer semejante acto de crueldad? ¿Cuánto tiempo estuvo Aloe petrificada en ese lugar? ¿Nadie vio nada? Preguntas sin respuestas» manifestaron desde el Proyecto 4 Patas.
«Todo lo que sucedió después fue una inmensa energía de esfuerzo, voluntad y amor por salvarle la vida. Un torbellino de sentimientos de indignación, bronca, tristeza e impotencia que potenciaba nuestra fuerza para recuperarla. Después de incansables horas, nuestra Aloe empezaba a asomarse: sus ojos, su patas, su cuerpo. Generamos un vínculo único e irrompible» añadieron.
Por último, con el corazón satisfecho de una tarea cumplida, concluyeron «hoy se cumple 1 año que Aloe vive en Proyecto 4 Patas, hoy los voluntarios nos abrazamos y gritamos más juntos que nunca: “CUANDO LA VOLUNTAD EXISTE, HAY MIL RECURSOS”.
