A partir de denuncias presentadas por Movistar ante el exponencial crecimiento de los robos de cables en la zona de José C Paz, la Fiscalía N°8 de San Martín, provincia de Buenos Aires, ordenó una serie de allanamientos que derivaron en el decomiso de más de 20 toneladas de cables de cobre.
La compañía presentó una denuncia ante la Brigada de Investigaciones de José C. Paz, en donde expuso la problemática del robo de cables que -si bien es un delito que ocurre a nivel nacional- había registrado un marcado crecimiento en los últimos meses en la zona de José C. Paz, afectando también a las localidades de Trujui, San Miguel y Las Catonas.
La Brigada de Investigaciones dio intervención a la Fiscalía N°8 de San Martín, que encabezó 16 allanamientos en chatarreras de la zona, en las cuales se encontraron cables telefónicos de cobre multipar quemados y enrollados en bolsones, listos para ser vendidos.
Las chatarreras son uno de los eslabones que intervienen en los delitos de robos de cables. Estos comercios, muchas veces compran en el mercado ilegal el material robado, y lo almacenan. De aquí pasan a los talleres de fundición, donde se separa el cobre del aislante que lo contiene, para así poder venderlo. En total, las autoridades intervinientes se incautaron de más de 20 toneladas de cobre.
Movistar, de acuerdo a las instrucciones de la Fiscalía, se hizo depositaria judicial de ese material.
La compañía realiza recorridas preventivas en inmediaciones del recorrido de sus tendidos para frustrar los episodios de robos y para comprobar que el personal que trabaja en la planta externa sea el autorizado.
En los últimos 180 días, se produjeron en la zona más de 280 episodios de robo de cables, afectando a unos 6.000 clientes. Fueron robados en ese lapso más de 23 mil metros de cables de cobre.
Movistar tiene habilitado, durante las 24 horas del día, el servicio de llamadas gratuitas 0-800-333-3433, para que los ciudadanos puedan realizar denuncias sobre hechos delictivos en inmediaciones de los tendidos telefónicos, subterráneos o aéreos, que posibiliten evitar la incomunicación por sustracción de cables, tras lo cual la compañía tomará las acciones necesarias.
