El servicio de neonatología del hospital provincial “Dr. Alberto Eurnekian” de Ezeiza, realizó junto a un equipo médico del hospital “El Cruce”, una cirugía de ductus cardíaco a un paciente nacido en la semana 30 de gestación.
Es la primera vez que en el hospital se aplica un método moderno para cerrar el conducto arterioso, que es el que comunica la aorta con la arteria pulmonar antes del nacimiento. “Se trata de una técnica menos agresiva que consiste en la colocación de un clip en el ductus mediante una incisión entre las costillas sin tocar la pleura”, explicó María Gabriela Rodríguez, jefa del servicio.
Dicho conducto cumple una función importante en la respiración y alimentación placentaria. Pero cuando el niño nace y comienza a respirar, el ductus debería cerrar para que deje de circular sangre desde la aorta hacia los pulmones. Esto sobrecargaría los pulmones de sangre y generaría un gran daño. El ductus del paciente en cuestión no cerró y tuvo que ser intervenido a los 20 días de nacido.
Según los especialistas, en los niños prematuros o nacidos a término pero con alguna enfermedad cardíaca congénita, es común que el ductus no se cierre. Cuando eso sucede, primero se recurre a un tratamiento con ibuprofeno y si el paciente no responde hay que intervenir.
Rodriguez destacó el tamaño del ductus del bebé. “Un ductus grande, como en el caso de este paciente, que era la mitad del tamaño de la aorta, puede ser peligroso a nivel pulmonar y para el corazón, sobre todo en un prematuro”. Agregó que el niño no presentó complicaciones y se encuentra sin respirador, lo que indica un favorable avance.
La cirugía fue realizada en un quirófano nuevo del hospital de Ezeiza, mediante un trabajo conjunto con profesionales de “El Cruce”. Participaron los cirujanos Miguel Chappuis y Mauro Higa, y el equipo técnico de instrumentadoras y anestesiólogo del hospital de Florencio Varela.
