A partir del 1° de enero de 2025, la receta electrónica será la única forma válida para la prescripción de medicamentos en todo el país. Según lo dispuesto por la Resolución 5744/2024, publicada recientemente en el Boletín Oficial, el Ministerio de Salud busca garantizar un sistema digital de salud eficiente y accesible, en el marco de la Ley N.° 27.553 de Recetas Electrónicas.
Un ecosistema de salud digital integrado
El principal objetivo de la normativa es asegurar que todas las farmacias del país puedan acceder a los medicamentos prescritos de manera electrónica. Para ello, se estableció que los sistemas informáticos de validación y despacho deberán estar disponibles para todas las plataformas de prescripción registradas. Estos repositorios digitales almacenan las recetas electrónicas, garantizando su privacidad, integridad y confidencialidad. Además, permiten que estas estén disponibles para su dispensa inmediata en las farmacias.
En el sitio web oficial del Ministerio de Salud, se encuentra disponible el listado de plataformas aprobadas por el Registro Nacional de Plataformas Digitales Sanitarias (ReNaPDiS). Solo las plataformas que completen el proceso de autenticación y cumplan con los protocolos técnicos y administrativos podrán operar en el nuevo sistema. Entre las exigencias, se destaca la necesidad de garantizar alta disponibilidad, sistemas de respaldo ante fallas y almacenamiento seguro durante el período establecido por la normativa.
Ventajas de la digitalización
La implementación de la receta electrónica apunta a mejorar la seguridad y eficiencia en el circuito de prescripción y dispensa de medicamentos. Esta modalidad asegura que las recetas sean emitidas por profesionales habilitados, evita errores derivados de la interpretación de la letra manuscrita y proporciona herramientas más precisas para la toma de decisiones médicas. Asimismo, simplifica los procesos administrativos y promueve la transparencia en el sistema de salud.
Plazos y transición
Las plataformas digitales tienen hasta el 31 de diciembre de 2024 para completar su adecuación. A partir del 1° de enero de 2025, las recetas en formato papel quedarán obsoletas, salvo aquellas emitidas antes del 31 de diciembre, las cuales podrán utilizarse dentro de su período de vigencia habitual.
Este cambio representa un paso significativo hacia la modernización del sistema de salud argentino, posicionándolo como más eficiente, accesible y seguro para profesionales y pacientes.