En una manifestación llevada a cabo ayer en el Túnel de Caseros, vecinos y repartidores de comidas rápidas de la zona unieron sus voces para exigir mayor seguridad en el distrito. La convocatoria surgió a raíz de una serie de robos y actos delictivos que han afectado a los trabajadores del rubro en los últimos días.
La protesta, que congregó a algunos repartidores y vecinos, generó diversas opiniones en la comunidad. Algunos apoyaron el reclamo, mientras que otros cuestionaron su validez al alegar que el tema de la seguridad corresponde a la provincia o al Ministro de Seguridad.
La movilización, que bloqueó completamente el acceso al túnel, estuvo marcada por bocinas, aplausos, bombos y un cántico que exigía seguridad. Sin embargo, tras una hora de protesta, los manifestantes intentaron cortar la calle Urquiza, lo que llevó a un tenso enfrentamiento con algunos conductores. En ese momento, personal de la comisaría 1a de Caseros, que se encontraba de civil, intervino y logró restablecer la circulación normal en pocos minutos.
Vecinos presentes en la manifestación destacaron que, a pesar de las dificultades, el diálogo entre los repartidores, los uniformados y los policías presentes fue respetuoso y constructivo.
Los reclamos de los repartidores se centraron en la constante inseguridad que enfrentan en su trabajo diario. Alegaron que sufren robos a mano armada, donde los delincuentes se llevan sus pertenencias o incluso sus motos.
Además, los repartidores expresaron preocupación por la falta de control en los límites del partido, mencionando zonas específicas como Pineral y Coronado, donde se han reportado incidentes peligrosos. Asimismo, solicitaron una mayor presencia policial en la zona y un compromiso para dar respuesta a sus necesidades de seguridad.