Está es la historia de Lisandro, un joven que toca el violín en el tren y en la Estación Ingeniero Brian protagonizo un hecho que se volvió viral.
Allí, otra de las protagonistas es Alejandra, que en una carta contó lo que pasó el sábado pasado, en el que vio como Lisandro estaba herido en el suelo de la estación tras ser tirado del tren por delincuentes que quisieron robarle el violín y no pudieron.
Está carta fue publicada en redes sociales por Alejandra, dónde además cuenta la desidia en materia de salud que vivió al momento de buscar asistencia para Lisandro.
Una historia hecha carta , este es el escrito viralizado por Alejandra:
Todo por un violín… Si, así comenzó este hecho de inseguridad. Eran la 14,30 hs del sábado 4 de febrero. A Lisandro Cantero le quisieron robar el violín, y para defenderlo se aferró a él. Los delincuentes no pudieron y lo tiraron del tren, en la estacion de Ingeniero Brian, Ramos Mejia. ¿Qué vale más?, me pregunto. ¿El violín o la vida? Para Lisandro, un pibe humilde que iba a tocar por unos mangos, el violín seguramente. De hecho tirado en el suelo nos dijo «no me lo podían robar, no es mío, me lo prestaron». Pucha que lo defendió.
Yo pasaba por ahí con mi camioneta. Había ido a buscar a mí hijo y por esas casualidades de la puta vida tambien traía instrumentos. El también es músico. Sin dudarlo, paramos y llamamos al 911 y pedimos ambulancia. Se empezaron a acercar otros vecinos, siguieron llamando y nada. Llegó la policía y nos dijo que había demora, insistimos y nada, corrían los minutos y también la desesperación. Lisandro le agarró la mano a mi hijo y le dijo «no me sueltes, no me quiero morir».
En todo momento nos agradecía estar ahí y nos pedía disculpas por la situación. Se me ocurrió preguntarle mientras estaba consciente si tomaba alguna medicación, y me dijo que sufría de epilepsia y tenía la medicación en el bolsillo del pantalón. Al rato tuvo un ataque de epilepsia.
La desesperación aumentó, no sabíamos que hacer. Como pudimos lo pusimos de costado. Sinceramente no sabíamos como proceder y ahí también queda al descubierto que la policía tampoco está capacitada para saber cómo actuar. Le suplicamos que lo llevaran al hospital y nos dijeron que no están autorizados a hacerlo, nos dijeron «si alguien lo lleva nosotros le abrimos camino». «Lo llevo yo», le dije.
Me preguntaron si yo me hacia cargo, «si claro cualquier cosa será mejor que estar acá tirado, necesita atención urgente». Fui a golpear las puertas de los vecinos para pedir una puerta para usar de tabla e inmovilizarlo y la conseguí. En ese momento a una chica ( Aldana y su marido) que también estaba ahí se le ocurrió llamar a los bomberos. Llegaron rápidisimo, le pusieron el cuello ortopedico y lo pusieron en la camilla.
Lo íbamos a subir a mí camioneta, porque ellos tampoco pueden trasladarlo. Y lamentablemente no entraba a lo largo. Cuando me comentaron «te podés comer un garrón, es una gran responsabilidad» no me importó. Me pareció que llevarlo lo ameritaba. Me dijeron «si querés hacer algo, andá al policlínico de San Justo a buscar la ambulancia» y ahí fuí. Llegué volando y pasando todos los semáforos en rojo, y justo en ese momento la ambulancia salía para el lugar del accidente, así que la seguimos.
Para todo ésto habían pasado más de dos horas. Y Lisandro tirado en el suelo, lastimado, sangrando con un corte en el ojo, convulsionando, con miedo, con dolor y agarrado de la mano de alguien como una suerte de querer aferrarse a la vida. La imagen que me queda en la retina es la de un chico tirado en el piso al lado de su violín.
Me pegó muy fuerte. No sé si será porque tengo un hijo músico y se cómo ama sus instrumentos, o será porque tiene la edad de otro de mis hijos. Pero me dolió y llore, lloré mucho.
Esta carta abierta es para hacer noticia de la desidia por parte del Municipio de La Matanza, no pude ser que no tengan ambulancias. No pude ser que no cuente con el SAME, no sé ni me interesa si es un tema político o qué, solo se que el intendente hace 20 años que nos gobierna y debería cuidarnos y esto no puede estar sucediendo. Si el intendente no actúa, le suplicamos al gobernador, a la ministra de salud o al presidente que tomen cartas en el asunto.
También le cabe responsabilidad a Trenes Argentinos, la estación de Ingeniero Brian es fantasma, no había nadie del personal, ni guardia ni policía. Todos los vecinos coinciden que ahí se dan muchos casos de inseguridad justamente porque nunca hay nadie.
La policía nos contó que semanas atrás sucedió algo similar con una abuela que se cayó en la vía pública, estaba sangrando y no había ambulancia. Tuvieron que parar a una ambulancia particular que pasaba por el lugar. También pasó el año pasado en Ciudad Evita, un nene que fué baleado tuvo que esperar más de media hora la ambulancia.
Estos son casos visibles, seguramente deben ser muchos más. Igual da lo mismo si es uno, dos o varios casos, la única realidad es que el intendente tiene responsabilidad por sus ciudadanos y debe darle prioridad a lo urgente como es la salud. Sr FERNANDO ESPINOZA SE NECESITAN AMBULANCIAS DE MANERA URGENTE. Dada la magnitud del partido y la cantidad de habitantes. Junto a mi hijo y otros vecinos hicimos lo humanamente posible. Usted tiene la responsabilidad de hacer lo mismo.
Marcela A. González.
