El pequeño atleta comenzó a competir a los 5 años. Durante su corta carrera, participó en más de 15 campeonatos donde el apoyo familiar fue la clave. “Todo el proceso de acompañamiento fue difícil, pero lo disfrutamos. Ver su felicidad al jugar fue la mejor recompensa”, aseguró Cintia, su madre, quien expresó un profundo orgullo por su hijo. “Arrancó desde muy chico. Nadie jugó como él en la historia del tenis de mesa argentino con sólo 9 años”, afirmó.
Para el 2022, Marcial definió sus aspiraciones: participar en torneos provinciales y en concursos organizados por la Federación de Tenis de Mesa Ciudad de Buenos (FeTeMBA) para clasificar al próximo Nacional como representante de la provincia.