Más de 6 mil barbijos producidos por la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de La Plata serán repartidos en las próximas horas entre la población de adultos mayores de nuestra ciudad y algunos pueblos del interior.
Un equipo de trabajo integrado por autoridades, docentes, alumnos y miembros del voluntariado de la unidad académica se encuentra trabajando en la elaboración de barbijos reciclables. Cada voluntario trabaja desde su casa utilizando los materiales que tiene a disposición. Incluso, en algunos casos, reutilizan la tela friselina del sobrante de las típicas bolsas que suelen entregarse en los congresos científico académicos.
El decano de la facultad, Doctor profesor Gabriel Lazo, explicó que “se trata de un modelo de barbijo doméstico que se elabora con tela de friselina doble, elástico y en cuyo interior se coloca un filtro de papel u otros elementos hidrorepelentes. Una vez utilizado, el filtro se descarta, mientras que el barbijo debe ser colocado en un recipiente con lavandina rebajada en agua y posteriormente lavado con agua y jabón para ser reutilizado”.
Sobre el modo en que se distribuirán los tapaboca en la ciudad, adelantó que “el operativo lo llevará adelante la Secretaría de Salud de la UNLP, a cargo del Doctor Sergio Lazo. Con un móvil de la Universidad, se recorrerán las puertas de los bancos y de organismos y dependencias de barrios carenciados, donde concurran adultos mayores, y se entregarán a quien lo requiera”.
El decano enfatizó que “la producción no se detiene y esperamos en los próximos días triplicar la cantidad fabricada hasta hoy”. Además, destacó que “muchos de nuestros alumnos que son del interior y se encuentran en sus localidades cumpliendo con el aislamiento, también están fabricando barbijos para ponerlos disposición de las autoridades de sus ciudades”.
Por su parte la Doctora Mercedes Medina, vicedecana de la facultad remarcó: “como profesionales que diariamente trabajamos sobre la cavidad bucal sabemos la importancia del barbijo como herramienta protectora y consideramos que, ante la escasez que se registra en estos días, resultaba importante aportar nuestro conocimiento para fabricar la mayor cantidad posible y acercarlos a la población más vulnerable”.
Para finalizar Lazo destacó que, “esta iniciativa propuesta por el decanato se realizó gracias al trabajo conjunto de la Secretaría de Extensión, dirigida por el Odontólogo Ezequiel Escudero, la Prosecretaría de Asuntos estudiantiles, a cargo del Odontólogo Emilio Amaro, el equipo del voluntariado coordinado por el Odontólogo Nicolás Bentivegna, el Centro de Estudiantes, alumnos de la cátedra de Odontología Preventiva y Social e ingresantes de esta unidad académica. Todo en coordinación con la Secretaría de Salud de la UNLP”
