A veces las decisiones de algunos pocos, para mal o para bien, movilizan sentimientos muy grandes, esta vez en Lomas de Zamora un grupo de vecinos se juntó en la Plaza Grigera, frente al municipio para demostrarle su apoyo en un simbólico abrazo solidario a Juan y Delia, los dueños de una legendaria calesita del distrito que tiene en sus espaldas una orden de desalojo por parte de la comuna para llevarse este histórico entretenimiento a otro lado, borrando más de 43 años de sonrisas y experiencias en ese lugar.
Con la calidez de la solidaridad los vecinos se hicieron un lugar este último sábado para acompañar a Juan y Delia, quienes recibieron a cada vecino que los fue a apoyar en ese espacio de muchas alegrías para los niños como es la calesita, en una cruzada de aliento que primero comenzó en redes sociales y se hizo real en la plaza donde además todo el grupo firmó un petitorio para impedir este desalojo, que se realizaría por un proyecto de reforma del espacio público frente al municipio de Lomas de Zamora.
«No se llega a entender una medida de esta naturaleza» expresó Juan, quien pidió a la comuna la posibilidad reubicarse en el mismo lugar, en la Plaza Grigera, incluido en el proyecto de remodelación de la misma que se llevará a cabo, pero no obtuvo respuestas favorables.
Al momento de hablar de la solidaridad ante esta decisión del municipio, Juan se conmueve y renueva esperanzas en el acompañamiento de los habitantes de Lomas de Zamora que muchas veces pasarona divertirse por su calesita, «estoy sorprendido con el apoyo que nos dan los vecinos, hasta calesiteros de Europa, me siento acompañado» detalló Juan.
La calesita también sufrió las embestidas de varias crisis que sufrió el país pero siempre estuvo allí, recibiendo a niños con sus padres donde las penas se calmaban con una vuelta y el agarrar la sortija, esta vez la sorpresa de un desalojo enciendo la alerta de la comunidad de Lomas, quienes como Rosa, una vecina que se acercó al lugar para el abrazo solidario contó «traje a mis hijos, y ahora traigo a mis nietos a que den una vueltas en la calesita, es un sitio emblemático para nosotros, no entendemos porque de la noche a la mañana lo quieren sacar o trasladar a otro lado».
Aún no hay novedades sobre la orden de desalojo,solo una promesa de reubicar el carrousel en otra plaza, lo que inquieta aún más las noticias de que será el destino de este entretenimiento, por ende, Juan expresó «tengo un trato muy respetuoso con el secretario de gobierno, pero me hubiera gustado hablar esto frente a frente con el Intendente».
Mientras la gente seguía firmando el petitorio, Juan observaba como sus vecinos dejaban plasmado hasta en una hoja de petitorio la solidaridad en este difícil momento, «agradezco a cada uno que me hizo llegar su mensaje de apoyo, a los que vinieron hoy, no me siento solo, me siento acompañado, no esperaba tantos mensajes de aliento, estoy muy agradecido» concluyó Juan, que con Delia, mostraron un cartel hecho por los que sumaron a la convocatoria del abrazo solidario difundida en redes sociales, que expresa el sentimiento de no querer perder más de 40 años de historia que representó algo tan simple y a su vez tan mágico para los niños de ayer y los de hoy, como es esta calesita.