La Organización Mundial de la Salud determinó al 17 de agosto como el Día Mundial del Peatón en memoria a la primera muerte en un siniestro de tránsito con un vehículo a motor en 1897. Desde entonces esta conmemoración tiene como finalidad promover el respeto hacia el peatón, así como recordar las responsabilidades y obligaciones que implica circular a pie.
El Observatorio Vial de la ANSV publicó el Anuario Estadístico de siniestralidad vial preliminar 2018 que arrojó un aumento del 15% en la cantidad de peatones fallecidos en un siniestro de tránsito, respecto al año anterior. Este índice se incrementó de 553 muertes en 2017 a 638, y representa al 12% del total nacional. A su vez, los resultados demuestran que la siniestralidad vial de los peatones es un fenómeno urbano, ya que el 83,2% ocurrieron en estas zonas. Las provincias que presentaron una mayor participación fueron CABA 44,2%, Tierra del Fuego 25% y Chubut 20,3%. Si tenemos en cuenta la edad, se destacan los menores de 14 años con el 11,6% y los mayores de 65 años 29,7%. Esto implica que la mortalidad de los peatones tiene un perfil de niños y de adultos mayores.
Es un problemática de convivencia propia de las grandes ciudades, donde se da la interacción de muchos autos, motos y personas caminando.Para entender la problemática enfocada en el comportamiento del peatón, la Agencia Nacional de Seguridad Vial realizó un estudio sociocultural sobre percepciones, creencias y actitudes de la población argentina en torno a la Seguridad Vial el cual reveló que tenemos un doble problema que se desprende de la falta de cumplimiento de las normas.
Por un lado, muchas veces en el esquema vial sucede que las dimensiones mandan: en el cruce, el peatón sabe que tiene prioridad, que le toca pasar, pero pasa el auto. Por otra parte, la mayoría de los peatones reconoció saber que corre peligro al realizar ciertas prácticas viales donde no respeta la norma. Cuando fueron encuestados sobre el nivel de peligrosidad percibida y frecuencia con la que cruza la calle con verde en el semáforo para el auto (y rojo para el peatón), el 84% entiende que corre un riesgo, pero el 36% lo realiza siempre o casi siempre. Es decir, 4 de cada 10 peatones cruza la calle poniendo en riesgo su vida.
Las percepciones más destacadas entre los encuestados llaman mucho la atención ya que, al ser el peatón el componente más vulnerable ante un siniestro vial, no se asume como un usuario que forma parte del la red vial. Esto puede explicar, en parte, por qué se consideran exentos de cumplir las normas viales, incurriendo en prácticas inseguras que ponen en riesgo su integridad física. Los resultados dan cuenta que el peatón muchas veces genera riesgos de los que no toma dimensión. Cuando cruza la calle por un lugar indebido, y que no está señalizado para los conductores, pone en peligro su vida y la de terceros ya que sorprende y obliga al conductor a realizar una maniobra de imprevisto y con poco tiempo para reaccionar.
El peatón reconoce que hablar por teléfono o manipular dispositivos electrónicos es la distracción más frecuente mientras cruza la calle, y pierde la atención de su camino. Sin embargo, no podemos dejar pasar por alto que el avance tecnológico hizo que nuestra dependencia hacia el teléfono celular sea cada vez mayor, ya que realizamos más actividades con él. En este sentido, no podemos pasar por alto que solo el de a pie se muestra afectado por este factor.
El 16% de los conductores observados de automóviles de 4 (o más) ruedas presentaron al menos un factor de distracción, el primero es el uso del celular con 9,4%, seguido por fumar con 3,2%. En los conductores de motos, el 10,5% presentaba al menos un factor de distracción, en primer lugar se encontraba el transporte de objetos con el 7,1% y 2% con el celular. De esta manera, podemos dar cuenta que el uso indebido del teléfono efectivamente es una causa muy importante afecta esta problemática.
Cumplir la ley de tránsito es muy importante para que podamos circular y prevenir cualquier tipo de incidente, las normas deben ser cumplidas para convivir en un entorno vial para todos los participantes. Al momento de circular, además de evitar distracciones, cuando nos encontramos con una intersección de calles el semáforo es la señal de tránsito más importante.2 de cada 10 conductores de motos no respetan la señal del semáforo y se adelantan en amarillo o en rojo (antes de que a luz se torne verde y habilite el paso). Cabe destacar que el cumplimiento es mayor entre conductores que conducen motovehículos de tipo comercial (81,6%) que entre quienes manejan una moto de uso particular (75,5%).
En el caso de los conductores de automóviles de 4 (o más) ruedas los análisis muestran que son quienes más respetan el semáforo, casi la totalidad no se adelanta en rojo o cruza en amarillo (94,8%). Sin embargo, los datos muestran que esta proporción disminuye entre menores de 35 años, en la región de AMBA y en ciudades con más de 1 millón de habitantes.
