Varios integrantes de la Comisaría 4° de Lomas de Zamora, en Lavallol, están acusados de explotación sexual violencia verbal y física de personas, en una red de prostitución creada en las periferias Ruta Provincial N°4 (Camino de Cintura).
El mayor responsable, el comisario de esa dependencia, Héctor Mario Coquean, estuvo prófugo gran parte del 2017 hasta que fue apresado recién el año pasado, acusado junto a otros compañeros de explotar a travestís, transexuales y mujeres, incluyéndolas en una red de trata de personas con fines sexuales.
Según el sitio Fiscales, Coquean deberá responder en un inminente juicio elevado por la Fiscalia Federal N°2 de Lomas de Zamora, como coautor del delito de trata de personas, en sus modalidades de recepción y acogimiento con fines de explotación, múltiplemente agravado: por la situación de vulnerabilidad y cantidad de víctimas -más de tres-, la participación de más de tres personas, por ser cometido por un funcionario policial y por haberse consumado la explotación.
La mecánica de la explotación según fuentes judiciales, había sido descubierta en el 2015 hasta el cese en 2016 de Coquean como comisario, aunque aun se cree que habría durado hasta 2017 su influencia en esta red, momentos en el que estaba fugado.
En la actividad, ayudaban algunos de los integrantes de la comisaria, estableciendo lugares, precios, y tiempos de servicios de las victimas de la red, donde se contaría con la «ayuda» 16 policías sumado a jefes de calle que se beneficiaron económicamente de la explotación sexual.
La elevación a juicio de esta causa responde ademas, según la fiscalía, a las suficientes pruebas recolectadas para comenzar el debate oral con este ex comisario sentado en el banquillo junto al resto de la banda, a la cual se les inició un embargo hasta alcanzar 2 millones de pesos.
Sumado a la explotación sexual, también se los culpa de violencia física y verbal, ya que las victimas relataban que las amenazaban con armas de fuego y las hostigaban.