En el marco de la semana mundial de esta enfermedad ocular, hubo controles sin turno previo en el Hospital Central. Si el glaucoma no se trata a tiempo puede terminar en ceguera.
Más de 200 personas se realizaron controles de la vista en el Hospital Central de San Isidro en el marco de la Campaña Nacional de Detección del Glaucoma, una enfermedad ocular que si no se trata a tiempo termina en ceguera.
“El glaucoma es una enfermedad neurológica que compromete los nervios ópticos. Es silenciosa y va quitando visión sin que el paciente se de cuenta. Pero con el control de la presión intraocular, que algo muy simple y sencillo, podemos detectar el glaucoma y de esta manera tratarlo y evitar la ceguera”, explicó Pedro Piantoni, jefe del Servicio de Oftalmología.
El examen de detección del glaucoma es rápido e indoloro. El oftalmólogo revisa a sus pacientes con diferentes aparatos para observar el fondo de sus ojos y tomar su presión intraocular. En caso de detectar posibles síntomas de glaucoma (presión intraocular alta o algún daño en el fondo de ojo) el oftalmólogo realiza otros estudios para evaluar la necesidad de iniciar un tratamiento. Estos estudios forman parte de la consulta habitual.
