En la amplia sala del segundo piso del Centro Cívico Cultural Beccar, los alumnos se ubican alrededor de una mesa para comenzar la clase. La profesora les indica los ingredientes de la receta del día. Luego, empieza la acción: colocan jugo de naranjas, bananas pisadas, azúcar y el extracto de vainilla en una cazuela. Tras casi una hora de espera, obtienen una riquísima mermelada de banana y naranja.
Durante el curso de Dulces, Conservas y Licores, los alumnos adquieren los conocimientos para la elaboración de dulces, mermeladas, jaleas, verduras, escabeches, licores, aceites, vinagres, desecados, abrillantados y ahumados. Incluye las técnicas para lograr una buena calidad, sabor, color y conservación a lo largo del tiempo, todo adecuado a las normas de sanidad en la alimentación.
Con este curso, se toma conciencia de la necesidad de alimentarnos de una forma saludable, al conocer el valor nutricional de los distintos productos. Los alumnos aprenden a hacer dulces y conservas 100 por ciento seguras sin químicos ni conservantes, pero que duran mucho fuera de la heladera. Con todo eso tienen una rápida salida laboral”, explica la profesora Josefina Grimaldi.
Además, las clases sirven como un lugar de encuentro, integración y actúan como una especie de terapia entre los participantes. También permite distraer la mente, relajarse y reducir el estrés impulsando energía positiva y autocontrol.
Mientras se preparaba para hacer aceites saborizados, Diana Alonso de San Isidro, comenta: “Gracias a este curso pude comenzar un emprendimiento familiar, donde elaboramos dulces y licores con frutos. Además de aprender, nos divertimos mucho con mis compañeras”.
Siempre quise cocinar todo tipo de cosas en forma casera, y cuando me enteré de este lugar no lo dudé y me anoté. Encima me queda muy cerca de mi casa”, concluye Marisa Giménez, vecina de Beccar.
El taller se dicta los lunes, de 18:00 a 20:00, en el Centro Cívico Cultural Beccar (Av. Centenario 1891). Más información en el 4512-3160.
