El ministerio de Salud de la Provincia volvió a convocar a las embarazadas y niños de entre 6 y 24 meses de edad para que concurran a vacunarse gratis contra la gripe, y recomendó intensificar todas las medidas necesarias para prevenir el contagio de esta enfermedad.
Las autoridades sanitarias explicaron que los síntomas de esta patología suelen aparecer a las 48 horas de efectuado el contagio y la recuperación tarda entre 7 y 14 días, sin necesidad de recibir tratamiento médico.
Sin embargo, en niños pequeños, embarazadas, adultos mayores y personas aquejadas por otras patologías prevalentes, la infección puede conllevar graves complicaciones.
Es por ello que desde la cartera sanitaria se insistió en la importancia de la vacunación, como una de las herramientas más efectivas para prevenir el contagio y la propagación de esta enfermedad, que se transmite por el contacto con secreciones que diseminan al toser o estornudar las personas infectadas y de superficies u objetos contaminados con estas secreciones.
Además de la vacunación, los especialistas recordaron también que, para evitar el contagio, es importante lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón; cubrirse la boca y nariz con un pañuelo descartable o con el ángulo interno del codo al toser o estornudar; tirar a la basura los pañuelos descartables inmediatamente después de usarlos; ventilar los ambientes y permitir la entrada de sol en casas y otros ambientes cerrados; mantener limpios picaportes y objetos de uso común; y no compartir cubiertos ni vasos.
En este sentido, desde la cartera sanitaria, también se recomienda que aquella persona que contrajo el virus no concurra al trabajo, escuela o lugares de reunión y guarde reposo para limitar el contacto y evitar el contagio a individuos que no han padecido la enfermedad.
En tanto, desde el ministerio de Salud provincial destacaron que los virus de la influenza pueden vivir e infectar a una persona solo pocas horas después de haber tenido contacto con una superficie infectada, por lo que no es necesario cerrar las oficinas, áreas de trabajo o escuelas ante casos indivisuales o aislados para limpiar y ventilar todas superficies del edificio, sino que las prácticas regulares de limpieza para removerlos o destruirlos son suficientes.
